Para entender lo que en esencia es OIDA Terapia, nos remitiremos a su origen. La palabra oida, de origen griego, hace alusión a la concepción yo sé. Ouk Eidos; que significa “yo sé”. De ahí, la famosa frase del filósofo Sócrates “oida oti ouden oida”, “sólo sé que nada sé”.
OIDA Terapia reconoce que cualquier persona puede sanarse al desarrollarse con responsabilidad, pues esta actitud otorga el regalo de ejercer la capacidad de discriminar entre lo bueno y lo malo. Al mismo tiempo otorga firmeza a las convicciones personales: Yo sé que esto es lo mejor para mi, esta es mi fe y por este sendero voy a caminar aunque se haga difícil el camino, mi fe se ha vuelto mi ideal. OIDA Terapia considera que la mentalidad de las personas debe ser completamente amplia, respetuosa, amable, y bondadosa. Dicha conciencia no es algo fácil de lograr, por eso todo aquello que favorezca el desarrollo de valores tales como tolerancia, determinación, humildad, respeto, y muchos otros, acompañados por la fe, es bienvenido en un proceso de OIDA Terapia.
La conciencia y la responsabilidad son facultades naturales del ser, por eso llamamos a la OIDA Terapia, Psicología Perenne, porque es algo inherente a la naturaleza humana. Si alguien decide practicar una fe en particular, su camino de OIDA Terapia se caracterizará como Oida Veda Terapia, Oida Budismo Terapia u OIDA Terapia Cristiana, de acuerdo a la inclinación teísta que siga. Así también, Feducación es para todos, cristianos, judíos, musulmanes, masones y otros. Nuestra interpretación de la palabra fe, es una fe liberada de fanatismo, liberada de institucionalismo, liberada de masacres. La mentalidad debe mantenerse abierta a aceptar otros senderos, ya que están sobrellevando una gran tarea que es propagar el amor universal.
El amor universal tiene como objetivo que los seres humanos vivir con principios de respeto, entregar bienestar a todos los que estén a su alcance, valora la visión de las naciones unidas, ante la necesidad de un cuerpo mundial que proteja los derechos. Desde la infancia, para que los niños y niñas de todos los niveles sociales encuentren soluciones en los principios prácticos de la educación basada en OIDA Terapia, la cual es llamada Feducación. De este modo, debe existir una revisión y re-evaluación de los currículos escolares y los sistemas educativos, para incorporar la fe, ya sea en cualquier de sus expresiones, para la formación de un ser humano responsable y amoroso.
El enfoque de la educación debe estar basado en crear ánimo, fe, amor, confianza y determinación en los alumnos y alumnas, sacando a la luz los valores universales y naturales, mientras que las metodologías de educación deben enfocarse en fomentar el bienestar de la humanidad a la par con el esfuerzo por el bienestar personal. Así como el sistema nacionalista le enseña a la gente a sacrificar su vida por la patria, del mismo modo las escuelas deben enseñar desde el inicio, que una persona se esfuerzo y sacrifique por el bienestar de todos.
La aplicación del sistema de OIDA Terapia para los diferentes niveles de la educación no requiere de grandes cambios en los currículos, sino una educación fundamentada en la amplitud y tolerancia ante todas las manifestaciones de la fe que sean positivas y progresivas para la humanidad. Es una gran esperanza servir a la humanidad con este esfuerzo que podrá tener gran impacto cuando sea puesto en marcha por gente dispuesta y capacitada.
